Para todos aquellos que estén "embarcados" en alguna festividad donde les haya tocado (aún sin su consentimiento) llevar el ponche, aquí les tengo una receta "calientita", es decir, "recién hurtada" del celosamente bien guardado recetario de la abuela. Así que sean mis cómplices y sáquenle provecho... ¡salud por todos los que -como yo-no saben cocinar Y QUE NO LES INTERESA APRENDER!
Necesitan:
- 250 gramos de tamarindos pelados (pueden conseguirlos con cáscara y poner a algún incauto a pelarlos)*
- 4 guayabas peladas y partidas en cubitos.*
- 200 gramos de ciruelas pasas.*
- 1 raja grande de canela.**
- 2 rajas de cáscara de naranja.**
- 25 tejocotes.*
- 1 taza de pasas.*
- 6 trozos de caña.*
- 4 manzanas.*
- 3/4 kg. de piloncillo.**
- 2 litros de agua hervida o de garrafón.
- Ollitas para cada ingrediente (*3 ollas pequeñas, **1 olla mediana)
¿Cómo hacemos el ponche?
- Pon a cocer, en ollas separadas los ingredientes. Ponles agua hasta que tapes los ingredientes, no hasta que llenes completamente la ollita.
- Saca del fuego las ollitas cuando los ingredientes se hayan cocido así:
- Tamarindos (van en una ollita): hasta que queden suavecitos. Cuando se enfríen pídele al incauto que les saque los huesitos.
- Manzanas, guayabas y tecojotes (van juntos en una ollita): cuando se pongan suaves y que no se desbaraten.
- Ciruelas pasas (van en una ollita): deja que se suavicen. Al enfriarse, sácales el huesillo.
- Piloncillo, canela y cáscara de naranja (van en una ollita todos): cúbrelos con agua y ponlos al fuego, mueve hasta formar una miel espesa. Retira la canela y la cáscara.
-
- En una olla coloca todos los ingredientes junto con el agua con que se cocieron. Agrega los dos litros de agua y pon la olla al fuego y déjalos hervir 10 minutos más.
- Retira el fuego y sirve en jarritos de barro. Primero ponles una cucharada de fruta y luego vierte la bebida.
Opción para "audaces": puedes adicionar al ponche (antes de servir, claro) sidra de manzana, naranjas en rebanajas, té de canela, duraznos o piña o fresas picadas y un poquito de clavos de olor (los que agarres con tres de tus deditos).
Disfruta y deja con el "ojo cuadrado" a todos aquellos impíos que aseguraban que en la cocina hasta el agua se te quema...¡Salud!
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